Vagabundo herrante, en el tunel de lavado,

esquirla maltrecha que adorna el cipres de hielo,

marmol oxidado que decora mi morada,

cuando la luz se hace mas intensa,

casi consigues palparla,

se esfuma entre tus dedos,

caes de nuevo arrodillado, abatido

te tambaleas, mientras intentas asumir el espejismo.

Puede que tarde una eternidad,

es mas, puede que no lo consiga jamas,

como casi todo lo que he intentado en mi vida,

solo una ostia tras otra,

sera mi recompensa,

a veces me pregunto ¿que hago mal?

cuando un efimero reflejo

desdibuja tu rostro,

y ya no puedes dar ni un paso mas,

sin replantearte si tiene sentido tu lucha,

si no seria mejor tirar la toalla,

¿tanto miedo tengo a sentirme un fracaso?

¿o tal vez ya lo sea y me niegue a aceptarlo?

El martilleo de los sueños,

que pierden significado,

su poder, su fuerza,

tan solo muere,

en la inhospita selva,

impoluta pureza,

de brazos estraños

arrancado.

Vierte le esencia del paisaje anegado en tu memoria,

tan solo una vez mas.

Reune las fuerzas de tu ultimo aliento,

esgrime la tetrica sonrisa del condenado,

dilapidado en vida

"los arboles mueren de pie"